Del Reloj de Candelario (Salamanca)

La primera referencia que encontramos en los libros del Ayuntamiento sobre el Reloj es del día 23 de Noviembre de 1925 y el alcalde es D. Enrique Peña López. Se refiere a una carta del relojero de Salamanca Antonio Ferreira en la que relaciona varios pueblos en que ha instalado relojes, para que puedan pedir informes. El pleno acuerda por unanimidad solicitarlos. Los pueblos en concreto son: Ledrada, Peñaranda de Bracamonte, Mozárbez y Santibañez de Béjar, todos de la provincia de Salamanca.
Apenas quince días después tienen la respuesta de los municipios referidos, estos manifiestan excelentes resultados de los relojes y tachan de formal y serio al Sr Ferreira. Por lo que la comisión formada por el Alcalde Enrique Peña López y los concejales Francisco Rico Sánchez y Felipe Mesanat Muñoz, acuerdan enviar una carta al relojero para que se persone el día 12 de Diciembre de 1925 en el Ayuntamiento y examinar la forma de la colocación de la máquina y a la vez presente el presupuesto de la obra para poder formalizar el contrato.

La compra del reloj del Ayuntamiento se realizó mediante contrato privado firmado el 20 de diciembre de 1925 entre el Alcalde D. Enrique Peña López y D. Antonio Ferreira, de profesión relojero y vecino de la ciudad de Salamanca, cuyo objeto fue la compra de un reloj de torre a instalar en la Casa Consistorial de Candelario.

En la sesión ordinaria del día 19 de Julio de 1926 se acordó dejar útil el acceso usado para hacer la obra del castillete para la colocación del campanario del reloj, para poder acceder al mantenimiento de estos.
Y en la sesión del 16 de Agosto del mismo año y ya con el reloj en funcionamiento, se acuerda la compra de útiles para la conservación de la maquina.
En estas dos últimas sesiones, consta como alcalde Francisco Muñoz Gómez.

El reloj estaba compuesto de una máquina número 6, de treinta horas de cuerda, con una rueda de sonería de 35 centímetros de diámetro; una esfera de cristal con cerco de hierro fundido con moldura de hierro de 41 centímetros de ancha por 110 de diámetro; un campanario de hierro dulce de cuatro columnas de 35 milímetros de grueso por dos metros de altura, más el sombrerete del campanario que será el tejadillo de chapa galvanizada con una altura total del campanario de hierro, desde la base del tejadillo de tres metros más la veleta, y seis poleas para la dirección del cable.

El precio de todo lo referido es: la máquina 1.800 pesetas, la esfera 400 pts. el campanario 300 pts. y las seis poleas 60 pts., ascendiendo a un total de 2.560 pts.

Las obras de albañilería y carpintería fueron a cuenta del Ayuntamiento; y la instalación total de la maquinaria y demás utensilios del Sr. Ferreira. Si bien los gastos de viaje y estancia en la localidad de éste corrieron a cargo del Ayuntamiento.

La garantía del buen funcionamiento del reloj fue por espacio ocho años. Siendo pagado el importe total de la compra, viajes y estancia a la terminación total del reloj con cargo al presupuesto municipal sin descuento alguno.

Después de mas de 2.000.000 de campanadas y 65 años de funcionamiento, el reloj del Sr Ferreira se jubiló y fue remplazada la máquina de cuerda por una electrónica, esto pasó a principios de los años 90.
La máquina está expuesta en el Salón de Plenos y las pesas de piedra en el patio del Ayuntamiento junto a las antiguas Bombas de Incendios.
Fuentes:
.-Libro 10  de Actas de sesiones celebradas por la Comisión Permanente del Ilustrísimo Ayuntamiento de Candelario Salamanca:
Folio 69 de 23 de noviembre de 1925.
Folio 70 y 71 de 7 de diciembre de 1925
Folio 94 de 19 de julio de 1925
Folio 96 de 16 de Agosto de 1925.
.-Notas de Candelario, de Juan Santos Curto García