Candelario dividido en dos bandos
NOTICIARIO DE LA HOJA PARROQUIAL DE CANDELARIO 20 de Enero de 1963 AÑO II Nº 26
APUNTES PARA LA HISTORIA El pueblo dividido en dos bandos
Espero el día en que aparezca en primera plana de la hoja parroqial la foto-copia de uno de los artesonados- y no el mejor, como hubiera deseado-, para que puedan conocer los primorosos trabajos con que nuestros antepasados adornaron la casa de Dios.
Mientras llega ese día referiré uno o mas pleitos que apasionaron a los feligreses en otro tiempo. Uno de ellos tuvo ocasión con la muerte del señor coadjutor. Los ánimos se apasionaron y no se nombró coadjutor sin acudir antes a reñida elección entre los dos bandos en que el pueblo estaba dividido. De una parte, los pudientes tuvieron de candidato a un señor capellán, emparentado con las mas influyentes familias. De otra parte, los demás nombraron candidato al señor sacristán, que era sacerdote. Las urnas dieron un número notablemente mayor de votos al señor sacristán. El bando contrario no se conformó, alegando irregularidades y falseamientos (como si se hubiesen adelantado dos siglos) y acudieron al señor obispo para que anulase la elección y nombrara a su candidato.
El señor obispo llamó a unos y a otros y les preguntó en virtud de que poderes nombraban coadjutor los vecinos de Candelario. Todos unidos contestaron que en virtud de una muy antigua bula pontificia. Exigió el señor obispo que le mostrasen la bula. Revuelto archivo, bularios y papeles la bula no apareció. Pero como a "Roma se va a por todo", los pudientes se fueron a Salamanca (Roma la chica), para buscar alli el documento y de allí llegó la deseada bula,que, presentada al señor obispo de Plasencia, no debió parecerle auténtica (sin duda debía de carecer de alguno de los veintidos sellos que ostentaba otra para ocultar su origen espúreo), y rompiéndola, en uso de sus derechos nombró- motu propio y sin presión de nadie- coadjutor al señor sacristán.
Así se acabó el pleito y el pretendido privilegio de Candelario para nombrar a sus coadjutores
APUNTES PARA LA HISTORIA El pueblo dividido en dos bandos
Espero el día en que aparezca en primera plana de la hoja parroqial la foto-copia de uno de los artesonados- y no el mejor, como hubiera deseado-, para que puedan conocer los primorosos trabajos con que nuestros antepasados adornaron la casa de Dios.
Mientras llega ese día referiré uno o mas pleitos que apasionaron a los feligreses en otro tiempo. Uno de ellos tuvo ocasión con la muerte del señor coadjutor. Los ánimos se apasionaron y no se nombró coadjutor sin acudir antes a reñida elección entre los dos bandos en que el pueblo estaba dividido. De una parte, los pudientes tuvieron de candidato a un señor capellán, emparentado con las mas influyentes familias. De otra parte, los demás nombraron candidato al señor sacristán, que era sacerdote. Las urnas dieron un número notablemente mayor de votos al señor sacristán. El bando contrario no se conformó, alegando irregularidades y falseamientos (como si se hubiesen adelantado dos siglos) y acudieron al señor obispo para que anulase la elección y nombrara a su candidato.
El señor obispo llamó a unos y a otros y les preguntó en virtud de que poderes nombraban coadjutor los vecinos de Candelario. Todos unidos contestaron que en virtud de una muy antigua bula pontificia. Exigió el señor obispo que le mostrasen la bula. Revuelto archivo, bularios y papeles la bula no apareció. Pero como a "Roma se va a por todo", los pudientes se fueron a Salamanca (Roma la chica), para buscar alli el documento y de allí llegó la deseada bula,que, presentada al señor obispo de Plasencia, no debió parecerle auténtica (sin duda debía de carecer de alguno de los veintidos sellos que ostentaba otra para ocultar su origen espúreo), y rompiéndola, en uso de sus derechos nombró- motu propio y sin presión de nadie- coadjutor al señor sacristán.
Así se acabó el pleito y el pretendido privilegio de Candelario para nombrar a sus coadjutores
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